lunes, 26 de octubre de 2009

¿Coaching o Psicoterapia?

En la búsqueda de estrategias adecuadas para optimizar la relación personal con el binomio mente-cuerpo y sobrellevar situaciones específicas, quizás nuestros clientes hayan considerado adentrarse en el proceso de Coaching o en la psicoterapia.

Dr. Ariel Orama López

En la búsqueda de estrategias adecuadas para optimizar la relación personal con el binomio mente-cuerpo y sobrellevar situaciones específicas, quizás nuestros clientes hayan considerado adentrarse en el proceso de Coaching o en la psicoterapia. Posiblemente hayan decidido consultarlo con sus colegas del trabajo, sus familiares o incluso con una mejor amiga: “yo estoy con un Coach Personal y me ha resultado muy bien… “mi terapista es excelente, yo llevo casi un año con ella”… ¿por qué un terapista y no un coach?”... “no seas anticuado, tú lo que necesitas es Coaching”. ¿Qué es el Coaching? ¿Cuál es la función del coach? ¿Se considera un sustituto de la psicoterapia? Las respuestas a estas preguntas no siempre han quedado claras para nuestros clientes. Como ejecutores del Coaching, debemos ser capaces de explicar de una forma simple en qué consiste nuestra profesión y reconocer sus distinciones al compararlo con la psicoterapia.

Como ya sabemos, el Coaching es definido según la International Coach Federation como “una relación profesional continua”, en la cual se utilizan una serie de preguntas poderosas y creativas que maximizan el rendimiento de los clientes y los apoyan en la acción de “producir resultados extraordinarios”. Bajo este paradigma, el cliente es funcional y se considera el experto en su vida: el coach es el experto en el Coaching, sus técnicas y en el arte de preguntar. A través de preguntas efectivas y creativas, el coach elabora un escenario co-creado con el cliente o coachee, en el cual se establecen metas de acuerdo a los intereses del último y se dirigen así a la acción.

Una de las distinciones esenciales que se establece en el arte del Coaching es que éste no corresponde a un proceso psicoterapéutico ni su ejecutor, el coach, se denominará como un profesional de la salud. Es un error craso considerarlo como un proceso sustituto a la psicoterapia y así queda estipulado por los ejecutores de esta disciplina. Tanto la Internacional Coach Federation (IAC) como la Internacional Association of Coaching (IAC)

destacan la importancia de referir a un profesional de la conducta humana u otro especialista, particularmentesi se manifiestan problemas emocionales o se evidencia alguna sintomatología que interfiera en dicho proceso.

Otra distinciónevidente del Coaching es que éste no ausculta en el pasado, como lo efectúa la psicoterapia, a menos que exista un fin e implicación en el futuro (ejemplo: “¿Qué aprendiste la primera vez que hiciste determinada acción, que te apoyará a lograr determinada meta”?). Por otra parte, las sesiones de Coaching pueden efectuarse por vía telefónica, Internet u otros medios de comunicación versus la psicoterapia, que aún valora la relación tradicional en un contexto fijo por las implicaciones éticas, de salubridad y de confidencialidad (oficina privada, contexto hospitalario, entre otros).

Algunos puntos en los cuales tanto la psicoterapia como el Coaching convergen son los siguientes: la utilización de preguntas abiertas (ejemplo: “¿qué es para ti la creatividad? ¿cómo defines la estabilidad económica?”), la utilización del lenguaje no verbal como herramienta para descubrir mensajes incógnitos del interlocutor, el rapport, la utilización de ejercicios especializados, la aplicación de sus técnicas de forma grupal o individual, la elaboración de estándares para la profesión y el establecimiento de un plan de acción. Ambas profesiones requieren un proceso de formación continua y fomentan una relación profesional de acuerdo a un código de ética establecido (como el de la APA, la IAC, la ICF y de otras organizaciones).

Una vez el cliente haya reflexionado esta información presentada por usted y entre ambos hayan analizado su situación actual, éste será capaz de determinar cuál proceso resulta adecuado para su vida o la de sus seres allegados. Finalmente, no olvidemos lo siguiente: el cliente tiene la última palabra.

Tabla I: Diferencias generales entre la Psicoterapia y el Coaching

La Psicoterapia

El Coaching

Evoluciona de la medicina, la psicología y la psiquiatría.

Evoluciona de los negocios y el desarrollo personal.

El cliente requiere un proceso terapéutico.

El cliente se concibe como funcional.

Se centra en las emociones y en los eventos pasados y presentes.

Se centra en la acción y el futuro.

Explora la raíz de los problemas y la solución de los mismos.

Se enfoca en la solución de problemas.

Utiliza técnicas terapéuticas validadas empíricamente (ejemplo: Modificación de Conducta).

Utiliza técnicas especializadas como parte de su metodología. Integra preguntas poderosas, creativas y dirigidas a la acción (Ejemplo: Rueda de la Vida).

El plan de tratamiento se elabora a partir de los signos, síntomas y el curso clínico.

Se establece un plan de acción adecuado, de acuerdo a las metas planteadas por el cliente y su ejecución en la realidad.

(El autor es psicologo clinico, Coach Creativo Certificado (CCC), Coach Ejecutivo/Corporativo (CE) y Facilitador Autorizado (FA) de CoachVille Spain & The International School of Coaching. Puede contactar con el autor desde autores@tisoc.com)